VEN, SÍGUEME, UNA OBRA MARAVILLOSA Y UN PRODIGIO DEL 24 DE FEBRERO AL 1 DE MARZO 2020
Cada semana tiene 168 horas, y solo algunas de ellas las pasamos en la Iglesia. Por tanto, si bien usted puede estar aprendiendo mucho en las clases de la Iglesia, también querrá esforzarse por aprender y vivir el Evangelio a lo largo de la semana. Considere que el aprendizaje espiritual es como el ejercicio: usted verá más beneficios si hace ejercicio varias veces por semana que si lo hace solo un día a la semana. Además, al grado que estudie las Escrituras en el hogar, recibirá perspectivas y entendimiento espiritual que bendecirán su vida y la vida de otras personas a medida que comparta lo que aprenda.
Sabemos bien que no es fácil en ocasiones sentarse cómodamente en nuestro hogar
o lugar favorito para estudiar, así que estos videos son una herramienta para
su estudio, en estos videos se comparte información complementaria, así que no
cambies tu estudio al 100% por estos audios, solo compleméntalos.
Cuando veas y escuches estos videos piensa lo siguiente ¿Qué experiencia obtuve
al estudiar las Escrituras en esta semana y escuchar este video? ¿Qué
reflexiones o aprendizaje puedo compartir con los demás?
Recordemos hermanos que El presidente Russell M. Nelson recientemente invitó a los
miembros de la Iglesia a que “aumenten su capacidad espiritual para recibir
revelación”2.
Al estudiar la palabra de Dios, usted le demuestra a Él que desea recibir
revelación. La revelación personal a menudo llega cuando estudiamos
revelaciones que el Señor ya ha dado a Sus profetas. Parafraseando el noveno
artículo de fe: cuando estudiamos todo lo que Dios “ha revelado”, nos
preparamos para recibir “todo lo que actualmente revela” y todo lo que “aún
revelará”.
Cuando reciba revelación, adopte el hábito de escribir sus impresiones y de
actuar de acuerdo con ellas. Eso no solo le demuestra al Señor que usted valora
las cosas que Él le enseña, sino que comprende que, a fin de cambiar gracias a
lo que aprendemos, debemos ponerlo en práctica.
En este audio recordaremos el gran amor que Jesucristo tiene para nosotros los
seres humanos. Leemos en el libro de Mormón lo siguiente:
Libro de Mormón
24 Él no hace nada a menos que sea para el beneficio del
mundo; porque él ama al
mundo, al grado de dar su propia vida para traer a todos los hombres a él. Por tanto, a nadie manda él
que no participe de su salvación.
Sabemos que gracias a Cristo podemos ser salvos del pecado, ya que el pago en
el huerto de Getsemaní por ellos, y el
dio su vida para que todos nosotros resucitemos, no importa si son malos o
buenos, todos sin excepción de personas vamos a resucitar. Jesús el Cristo ha
hecho posible que el evangelio este hoy en nuestros días, que podamos sellarnos
con nuestras familias por esta vida y por la eternidad, siempre y cuando
guardemos los convenios hechos con él.
Tal vez es la primera vez que escuchas acerca de la iglesia y del evangelio que
Jesucristo ha restaurado por medio de su profeta y no sabes que es la
expiación.
Tal y como se utiliza en las Escrituras, expiar
consiste en padecer el castigo por los pecados, con lo cual se eliminan los
efectos del pecado y el pecador arrepentido puede reconciliarse con Dios.
Jesucristo fue la única persona capaz de llevar a cabo la Expiación por toda la
humanidad. Gracias a Su Expiación, todas las personas resucitarán y quienes
hayan obedecido Su Evangelio recibirán el don de la vida eterna con Dios.
Nuestro Padre Celestial y Jesucristo desean que todos podamos participar de su
evangelio y ser exaltados. Leemos los siguiente:
Libro de Mormón
24 Él no hace nada a menos que sea para el beneficio del
mundo; porque él ama al
mundo, al grado de dar su propia vida para traer a todos los hombres a él. Por tanto, a nadie manda él
que no participe de su salvación.
25 He aquí, ¿acaso exclama él a alguien, diciendo:
Apártate de mí? He aquí, os digo que no; antes bien, dice: Venid a mí, vosotros, todos los extremos de la
tierra, comprad leche y miel sin dinero y sin precio.
26 He aquí, ¿ha mandado él a alguno que salga de las
sinagogas, o de las casas de adoración? He aquí, os digo que no.
27 ¿Ha mandado él a alguien que no participe de su salvación? He aquí, os digo que no, sino que la ha dado gratuitamente para todos los hombres; y ha
mandado a su pueblo que persuada a todos los hombres a que se arrepientan.
28 He aquí, ¿ha mandado el Señor a alguien que no
participe de su bondad? He aquí, os digo: No; sino que todo hombre tiene tanto privilegio como cualquier
otro, y a nadie se le prohíbe.
33 Porque ninguna de estas iniquidades viene del Señor,
porque él hace lo que es bueno entre los hijos de los hombres; y nada hace que
no sea claro para los hijos de los hombres; y él invita a todos ellos a que
vengan a él y participen de su bondad; y a nadie de los que a él vienen desecha, sean negros o blancos, esclavos o libres, varones o
mujeres; y se acuerda de los paganos; y todos son iguales ante Dios, tanto los judíos como los
gentiles.
2 Nefi 26:33. “Él invita a todos ellos a que vengan a él” •
El presidente James E. Faust (1920–2007),
de la Primera Presidencia, nos extendió el desafío de dejar a un lado el prejuicio y de trabajar como hermanos y hermanas en el reino: “Espero que podamos vencer cualquier diferencia de cultura, raza y lengua… “…En mi opinión, ninguna raza o clase es superior a cualquier otra en lo que concierne a espiritualidad y fidelidad… “La paz espiritual no se encuentra en ninguna raza, cultura o nacionalidad, sino mediante nuestros compromisos con Dios y los convenios y las ordenanzas del Evangelio” (Liahona, julio de 1995, págs. 68–69, 71). •
El élder M. Russell Ballard explicó que las bendiciones del Evangelio son para todos los hijos de Dios:
“Nuestro Padre Celestial ama a todos Sus hijos por igual y de
una manera perfecta e infinita. El amor que siente por Sus hijas no es
diferente del que siente por Sus hijos. Nuestro Salvador, el Señor Jesucristo,
también ama por igual a hombres y mujeres. Su sacrificio expiatorio y Su
evangelio son para todos los hijos de Dios. Durante Su ministerio terrenal
Jesús sirvió, sanó y enseñó a hombres y mujeres por igual. “…Por ejemplo, la
fe, el arrepentimiento, el bautismo y el don del Espíritu Santo son requisitos
para todos los hijos de Dios, sin importar su sexo. Lo mismo se aplica a los
convenios y a las bendiciones del templo. La obra y gloria de nuestro Padre es
llevar a cabo la inmortalidad y la vida eterna de Sus hijos (véase Moisés
1:39)… Su don más grandioso, el don de la vida eterna, se halla al alcance de
todos” (“La igualdad a pesar de las diferencias”, Liahona, enero de 1994,
pág. 105).
2 Nefi 26:23-28. La salvación se nos ofrece a todos por igual Nefi dijo que
Dios "no hace nada a menos que sea para el beneficio del mundo" (2
Nefi 26:24) y para la salvación del hombre. ¿A quiénes se ofrece la salvación
de Cristo? ¿Hay alguien a quien se excluya? (Véase el verso 27.) La seguridad
de que la salvación se le ofrece gratuitamente a todo ser humano no significa
que no se requiera ningún esfuerzo de nuestra parte. El Señor dijo: "Si
haces lo bueno, sí, y te conservas fiel hasta el fin, serás salvo en el reino
de Dios, que es el máximo de todos los dones de Dios; porque no hay don más
grande que el de la salvación" (D. y C. 6:13).
El Libro de Mormón es
esencial en la obra de Dios en los últimos días.
2 Nefi 27.
El Señor efectuará “una obra maravillosa y un prodigio” •
El último de los escritos de Isaías que citó Nefi
(Isaías 29) revela que en los anales bíblicos faltan muchas importantes
profecías sobre la Restauración del Evangelio en los últimos días. Una
comparación concienzuda de Isaías 29 y el mismo capítulo en las planchas
de bronce (2 Nefi 27) demuestra que algunas de las partes “claras y
sumamente preciosas” que se han “quitado” (1 Nefi 13:26–27) incluyen:
1. El contexto de la profecía en los últimos
días (véase 2 Nefi 27:1).
2. Un “libro” que Isaías profetizó que saldría
a luz en los últimos días (versículo 6).
3. El libro estaría “sellado” (versículos
7–8).
4. Las funciones de Moroni y José Smith para
sacar a luz el Libro de Mormón (véanse los versículos 9–10).
5. “Tres testigos” que verían el “libro” y
testificarían “de la verdad… de las cosas que contiene” (versículos 12–13). No
es difícil imaginarse que al quitar estas profecías sobre la Restauración que
habría de venir, el adversario tramaba “pervertir las rectas vías del Señor,
para cegar los ojos y endurecer el corazón de los hijos de los hombres”
(1 Nefi 13:27).
2 Nefi 27:7–11. “He aquí, el libro estará sellado” • El élder Neal A. Maxwell (1926–2004),
del Quórum de los Doce Apóstoles, habló de Escrituras que todavía no han sido
reveladas, especialmente unas del Libro de Mormón: “Todavía recibiremos muchas
Escrituras más, incluso los escritos de Enoc (véase D. y C. 107:57),
todos los escritos del apóstol Juan (véase Éter 4:16), los anales de las tribus
perdidas de Israel (véase 2 Nefi 29:13) y esa porción de aproximadamente
dos terceras partes de las planchas del Libro de Mormón que está sellada: ‘Y
vendrá el día en que las palabras del libro, que fueron selladas, se leerán desde
los techos de las casas; y serán leídas por el poder de Cristo, y se revelarán
a los hijos de los hombres todas las cosas jamás habidas entre ellos, y cuantas
haya aun hasta el fin de la tierra’ (2 Nefi 27:11). Hoy cargamos con
conveniencia la combinación triple y la Biblia, pero llegará el día en que, por
motivo de las Escrituras adicionales que están por venir, tal vez tengamos que
tirar de un carrito rojo repleto de libros” (A Wonderful Flood of Light, 1990,
pág. 18).
2 Nefi 27:24-28. "Una obra maravillosa y un prodigio" La "obra
maravillosa y un prodigio" del que habla el Señor en el registro compilado
en 2 Nefi 27:26 abarca el Libro de Mormón, la restauración del sacerdocio y de
la Iglesia, y la presencia de profetas modernos sobre la tierra. Pero en
realidad, es mucho más que todo ello; es la restauración de todas las cosas,
incluso el establecimiento de Sión nuevamente sobre la tierra.
2 Nefi 28:2. Este libro será “de gran valor” • El libro que se menciona en 2 Nefi 28:2 es el Libro de Mormón, y es el mismo libro al que Nefi se
refirió en 2 Nefi 26–27, 29. Nefi dijo que el libró será “de gran valor”
para nosotros a causa de las condiciones de los últimos días. El presidente
Ezra Taft Benson (1899–1994) nos enseñó a reconocer el gran valor del Libro de
Mormón: “Todos los principales escritores del Libro de Mormón testificaron que
escribían para generaciones futuras… “Si ellos vieron nuestros días, y
eligieron aquellas cosas que serían de máximo valor para nosotros, ¿no es eso
suficiente razón para estudiar el Libro de Mormón? Constantemente deberíamos
preguntarnos: ‘¿Por qué inspiró el Señor a Mormón (o a Moroni o a Alma) para
que incluyera esto en su registro? ¿Qué lección puedo aprender de esto que me
ayude a vivir en esta época?’… “…En el Libro de Mormón encontramos lecciones
para enfrentar la persecución y la apostasía. Aprendemos mucho de cómo hacer la
obra misional. Y más que cualquier otra parte], en el Libro de Mormón vemos los
peligros del materialismo y de poner nuestro corazón en las cosas del mundo.
¿Puede alguien dudar que este libro sea para nosotros y que en él encontremos
gran poder, consuelo y protección?” (Liahona, enero de 1987, págs. 4,
2 Nefi 28:2-14. Podemos encontrar el valor que tiene el Libro de Mormón. El Libro de Mormón es el libro que se menciona
en el pasaje de 2 Nefi 28:2 y que Nefi describe en 2 Nefi 27. Este dijo que el
libro sería de gran valor para nosotros, porque mediante él podríamos reconocer
las condiciones del mundo en los últimos días. El "porque" con que comienza
2 Nefi 28:3 significa "debido". En otras palabras, el Libro de Mormón
será de gran valor para nosotros en los últimos días debido a que imperarán las
siguientes condiciones:
1. Se establecerán iglesias que: a. Reclamarán ser del Señor pero en realidad
se encontrarán llenas de contención (véanse los versos 3-4 y compárese con José
Smith-Historia 5). b. Enseñarán con su conocimiento y negarán al Espíritu Santo
(véase 2 Nefi 28:4). c. Negarán el poder de Dios al negar la autoridad del
sacerdocio y al negar que El continúa interviniendo en la vida del hombre de la
misma manera que antes (véanse los verso 5-6). d. Enseñarán que el pecado y la
iniquidad no son tan malos (véanse los verso 7-8). 2. Habrá muchos que
enseñarán doctrina falsa, se engreirán, obrarán en tinieblas y se corromperán
(véanse los verso 9-12). 3. El orgullo, los falsos maestros y las falsas
doctrinas serán motivo de muchos males (véase el verso 12): a. La explotación
de los pobres (véase el verso 13). b. La persecución de los humildes (véase el
vers. 13). c. Una apostasía general (véase el verso 14). d. Se engaña a los
humildes seguidores de Cristo (véase el verso 14). ¿En qué forma el Libro de
Mormón contrarresta esas condiciones en nuestra época? El meditar sinceramente
en la respuesta a esta pregunta ampliará nuestra perspectiva en cuanto al
impacto de este libro y en cuanto a la razón por la cual desempeña una función
tan importante en la restauración de la Iglesia y del Evangelio de Jesucristo.
Pero aun sabiendo todo esto habrá hombres que no aceptaran al Libro de Mormón
como verdadero, leemos lo siguiente:
Libro de Mormón
6 ¡Oh necio, que dirás: Una Biblia; tenemos una Biblia y no necesitamos más Biblia!
¿Tendríais una Biblia, de no haber sido por los judíos?
7 ¿No sabéis que hay más de una nación? ¿No sabéis que
yo, el Señor vuestro Dios, he creado a todos los hombres, y que me acuerdo de los que
viven en las islas del mar; y que gobierno arriba en los cielos y
abajo en la tierra; y manifiesto mi palabra a los hijos de los hombres, sí,
sobre todas las naciones de la tierra?
8 ¿Por qué murmuráis por tener que recibir más de mi
palabra? ¿No sabéis que el testimonio de dos naciones
os es un testigo de que yo soy Dios, que me acuerdo tanto de una
nación como de otra? Por tanto, hablo las mismas palabras, así a una como a
otra nación. Y cuando las dos naciones se junten, el testimonio de las dos se juntará
también.
9 Y hago esto para mostrar a muchos que soy el mismo ayer, hoy y para siempre; y que declaro mis
palabras según mi voluntad. Y no supongáis que porque hablé una palabra, no puedo hablar otra; porque aún no está terminada
mi obra; ni se acabará hasta el fin del hombre; ni desde entonces para siempre
jamás.
10 Así que no por tener una Biblia debéis suponer que
contiene todas mis palabras; ni tampoco debéis suponer que no he hecho escribir
otras más.
11 Porque mando a todos los hombres, tanto en el este, como en el oeste,
y en el norte, así como en el sur y en las islas del mar, que escriban las palabras que yo les hable; porque de
los libros que se escriban juzgaré yo al mundo, cada cual según sus obras, conforme
a lo que esté escrito.
Cuando estudiamos con más profundidad
entendemos que la biblia no está completa, le faltan libros y cartas,
comprendemos que debido que ha pasado de mano en mano y de traducción en
traducción sean perdido cosas preciosas
y fáciles de comprender. Y Nuestro Padre Celestial previendo esto nos dio el
libro de Mormón. Aun sabiendo que en nuestro días habrá sordera y ceguera
espiritual.
2 Nefi 27:29. La sordera y la ceguera espiritual El élder Bruce R. McConkie
explica lo siguiente: "La sordera espiritual describe el estado de los que
carecen de espiritualidad, aquellos cuyos oídos espirituales no percatan los
susurros de la voz apacible del Espíritu. Del mismo modo, la ceguera espiritual
es la marca identificadora que señala a los que no alcanzan a ver la mano de
Dios que se manifiesta en los asuntos de los hombres. Tales personas tienen
incredulidad y dureza de corazón (véase D. y C. 58:15); son los que procedieron
a 'endurecer sus corazones y a cegar sus almas' (3 Nefi 2:1)" (Mormon
Doctrine, pág. 184).
2 Nefi 27:30-34. Es consumido el
escarnecedor
Compare 2 Nefi 27:30-34 con Isaías 29:19-23.
"En relación con la publicación de
este libro [el Libro de Mormón], se menciona otro hecho: ‘Porque... el violento
es reducido a la nada, y es consumido el escarnecedor; y todos los que velan
por la iniquidad son talados' [2 Nefi 27:31]. ¿Se ha cumplido esa profecía? No,
pero se cumplirá a su debido tiempo y en su estación; mas no hasta que hayan
oído las palabras del libro y se les haya advertido plenamente en cuanto a la
aparición de la verdad que salió de la tierra. Una vez que la verdad haya
resonado en sus oídos, si endurecen el corazón contra esa palabra, es decreto
del Todopoderoso que sean talados todos los que velan por la iniquidad. Todos
los que persiguen a los santos del Dios viviente, todos los que hacen pecar al hombre
por una palabra, y tienden trampa al que reprende a la puerta, y apartan al
justo por una pequeñez, todos ellos serán consumidos" (Orson Pratt, en
Journal of Discourses, 15:188).
2 Nefi 27:35. La plenitud del evangelio " 'Y los extraviados de espíritu
aprenderán inteligencia, y los murmuradores aprenderán doctrina' (Isaías
29:24). Ese es el propósito del Libro de Mormón. A los miembros de las iglesias
falsas que se extravían espiritualmente y que piensan que tienen la verdad, el
Libro de Mormón los conduce a la plenitud del evangelio. Quienes basan sus
creencias en versículos aislados y pasajes confusos, y que han dudado y
murmurado acerca de lo que parecieran ser conflictos bíblicos, aprenden por
medio de él doctrina verdadera y fidedigna. Ya no tienen que preocuparse más
acerca de la Expiación, de la salvación sólo por medio de la gracia, del
bautismo de los infantes, del sacerdocio, de los dones del Espíritu, de los
pasajes concernientes a una apostasía, una restauración del evangelio y el
recogimiento de Israel, ya que todas esas cosas se aclaran y se comprenden por
medio de este nuevo testigo de Cristo y Su evangelio, este testigo que lleva el
nombre del profeta Mormón" (Bruce R. McConkie, The Millennial Messiah,
págs. 174-175).
"Los Santos de los Ultimas Días saben que hay un Dios, y con la misma
certeza saben que Satanás vive, que es un poderoso personaje de espíritu: el
mayor enemigo de Dios, del hombre y de la rectitud. "La realidad de la
existencia de Dios y del diablo la establecen en forma concluyente las
Escrituras y la experiencia humana" (en Conference Report, abril de 1971,
pág. 22; o Ensign, junio de 1971, pág. 35).
2 Nefi 29:1-6. "iUna Biblia! iUna Biblia!" Satanás desencadenó una
batalla desesperada para evitar que el Libro de Mormón saliera a luz (véase D.
y C. 10). Al fracasar en su intento, la siguiente
táctica
que utilizó
fue desacreditar el valor del libro a la vista de la gente. "El élder Bruce R. McConkie
comentó
acerca de los que rechazan el Libro de Mormón, en los siguientes términos: "Por extraño que parezca a los
enemigos de la verdad de nuestra época, su misma oposición a recibir más de la palabra del Señor mediante el Libro de Mormón es una de las señales de los tiempos. Su rechazo, resumido en el estribillo de
'iUna Biblia! iUna Biblia! ¡Tenemos una Biblia, y no puede haber más Biblia!'
hizo que el Señor los reprimiera severamente... '¿Por qué murmuráis por tener
que recibir más de mi palabra?' (2 Nefi 29)" (Mormón Doctrine, pág. 719).
Y así es como Satanás trabaja junto con aquellos y que le siguen, aun dentro de
la iglesia encontraremos a hermanos que serán cegados y se llenaran de ira al no comprender la doctrina y por qué el
Señor dirige a su iglesia de tal manera, y pelearan contra el reino de Dios, y
esto ya se ve cada vez más.
2 Nefi 28:8. "Comed, bebed y divertíos" ¿Cuántas veces hemos
escuchado esas palabras?
El presidente George Albert Smith habló acerca de cómo aun las pequeñas
imprudencias nos alejan del Espíritu y nos ponen en poder de Satanás. Luego de
citar a 2 Nefi 28:8, el presidente Smith dijo: "¿No es justamente eso lo que
el diablo dice a los hijos de los hombres hoy día, tan claramente como está
escrito aquí? ¡Oh, cometed un pecadito, eso no hará daño a nadie; mentid un poquito,
eso no causará daño; el Señor perdonará y solamente se os castigará con algunos
correazos y finalmente seréis salvos en el Reino de Dios! Eso es lo que le dice
al hombre o a la mujer que ha aprendido la Palabra de Sabiduría: bebe un poco
de té negro, no te hará daño; fuma un poco de tabaco, que no hará diferencia
alguna; un poco de bebida alcohólica no te dañará para nada. Estas son
pequeñeces, pero Satanás siempre empieza por las pequeñeces, no con lo grande.
Eso es lo que esta mañana yo quería que recordáramos, hermanos. Son esos
susurros insidiosos e insignificantes los que traicionan al hombre y lo ponen
bajo el poder del diablo. Quiero deciros, a juicio mío, que el uso del tabaco,
aunque a algunos parezca cosa sin importancia, se ha convertido en el medio de
destruir la vida espiritual de muchos, el medio de apartarlos de la compañía
del Espíritu de nuestro Padre, los ha alejado de la compañía de hombres y
mujeres buenos, y ha traído sobre ellos el reproche de sus hijos; y, sin
embargo, el diablo le dice al hombre: ¡Oh, es sólo una pequeñez!" (en
Conference Report, abril de 1918, págs. 39-40).
Años más tarde, en un discurso pronunciado en una conferencia, el presidente
Smith dijo hablando del mismo pasaje de las Escrituras: " ' ... mentid un
poco, aprovechaos de uno por causa de sus palabras ... ' "Pensad en lo que
eso significa, los susurros del adversario instándonos a mentir un poquito. Sea
una mentira dirigida a una organización religiosa, a una organización de
negocios, a una organización política, o a un individuo, la mentira marcará al
que la dice, y tarde o temprano éste tendrá que rendir cuentas del mal
cometido. " ' ... mentid un poco, aprovechaos de uno por causa de sus
palabras, tended trampa a vuestro prójimo; en esto no hay mal; y haced todas
estas cosas, porque mañana moriremos; y si es que somos culpables, Dios nos
dará algunos correazos, y al fin nos salvaremos en el reino de Dios'. "Eso
es lo que el adversario de la justicia dice a los hijos de los hombres. Eso es
lo que Lucifer, que corrompe a la gente, susurra en sus almas. Esa es la clase
de doctrina que diseminan por el mundo algunos de aquellos que deberían ser los
líderes de la moral y la rectitud. Pero vosotros, mis hermanos y hermanas,
tenéis la obligación de refutar tales conceptos cuando sepáis de ellos"
(en Conference Report, octubre de 1932, pág. 29).
En la clase queridos
hermanos nos preguntan lo siguiente:
¿Ha tenido algún miembro de la clase alguna
experiencia en la que haya invitado a alguien a leer el Libro de Mormón que
quisiera compartirla?
En esta parte hermanos déjanos tu experiencia de como compartiste el libro de
Mormón con otras personas, recuerda que al compartir tu testimonio ayudas a más
personas a acercarse al evangelio de Jesucristo.
Yo compartiré una de tantas que tengo, cuando tenía entre 14 y 15 años yo
trabaja en un carwash ahí conocí a mi amigo Ulises, él trabajaba con una banda
de música regional que se llamaba en aquel entonces Banda la Patrona de Rosario
Sinaloa México. Empezamos a platicar y al tiempo él me dijo que yo no era como
los otros jóvenes de mi edad, le compartí por qué yo no era así, después le
regale un par de libros, al tiempo mis padres tomaron la decisión de cambiarnos
de lugar y perdí contacto con mi amigo, al paso del tiempo mi padre me entrego
una carta la cual esta publicada en mi blog de historias y testimonios. Pero la
compartiré aquí con ustedes, en ella dice:
Con esta historia hermanos termino el video, sabiendo que hay más contenido que
tocar en la clase, el libro de Mormón cambia vidas, este evangelio cambia
nuestra forma de ver el mundo, una vez alguien me dijo podemos alejarnos de la
iglesia, pero jamás olvidaremos quienes somos debido a este evangelio, así
estemos pecando siempre recordaremos al ver una Iglesia, a los misioneros y el
templo.
No les conozco y más sin embargo están aquí escuchando este audio, y les digo
que yo sé que el libro de mormón es verdadero, al leer y al esforzarme en vivir
este evangelio que en ocasiones fallo por ser imperfecto como todos, he podido
obtener mi testimonio y es la razón que
mucho antes de tener mis blogs, páginas y este canal, compartía el
evangelio, soy converso desde 1993 y agradezco a mis padres por aceptar el
evangelio y así leer el libro de Mormón.
2 Nefi 25: 21-26
21 De modo que por esta
causa el Señor Dios me ha prometido que estas cosas que aescribo serán
guardadas, y preservadas y entregadas a los de mi posteridad, de generación en
generación, para que se cumpla la promesa hecha a José, que su linaje no bperecería jamás,
mientras durase la tierra.
22 Por
tanto, estas cosas irán de generación en generación mientras dure la tierra; e
irán de acuerdo con la voluntad y deseo de Dios; y por ellas serán ajuzgadas las
naciones que las posean, según las palabras que están escritas.
23 Porque
nosotros trabajamos diligentemente para escribir, a fin de apersuadir a
nuestros hijos, así como a nuestros hermanos, a creer en Cristo y a
reconciliarse con Dios; pues sabemos que es por la bgracia por la
que nos salvamos, después de chacer cuanto
podamos;
24 y
a pesar de que creemos en Cristo, aobservamos la
ley de Moisés, y besperamos anhelosamente
y con firmeza en Cristo, hasta que la ley sea cumplida.
25 Pues
para este fin se dio la aley; por tanto, para
nosotros la ley ha bmuerto, y somos
vivificados en Cristo a causa de nuestra fe; guardamos, empero, la ley, a causa
de los mandamientos.
26 Y ahablamos de
Cristo, nos regocijamos en Cristo, predicamos de Cristo, bprofetizamos de
Cristo y escribimos según nuestras profecías, para que cnuestros hijos
sepan a qué fuente han de acudir para la dremisión de
sus pecados…
Hermanos y hermanas El libro de Mormón contiene la plenitud para ser salvos,
mas no contiene toda la verdad ya que aún hay más partes por traducirse y revelarse. Comparto esto en
el nombre de Jesucristo Amen.
Con las explicaciones de cada capítulo es más facil en entender los capítulos de Isaías. Saludos ☺️
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